Bienestar animal
El principio de las 5 necesidades

¿Qué es el Bienestar animal?

Es la ciencia que estudia las necesidades de los animales bajo control humano. Por definición el bienestar animal es el modo en que un animal afronta las condiciones de su entorno. Un animal está en buenas condiciones de bienestar si (según indican pruebas científicas) está sano, cómodo, bien alimentado, está y se siente seguro, puede expresar el comportamiento típico de su especie y si no padece sensaciones desagradables de dolor, miedo o desasosiego. Para alcanzar el mejor grado de bienestar de un animal, es necesario que se prevengan sus enfermedades y se les administren tratamientos veterinarios, que se les proteja, maneje y alimente correctamente, que se les manipule con cariño y cuidado y se los sacrifique de manera compasiva. También se enfatiza en un acercamiento al bienestar animal basado en los sentimientos de los animales. El Bienestar de un ser sintiente está primariamente relacionado con su estado subjetivo (sensaciones). Por lo tanto las medidas de bienestar deben estar basadas en los sentimientos y/o emociones, más que en la presencia o ausencia de sus funciones biológicas reducidas. Estos son los elementos clave de una Tenencia Responsable. Se enfoca en qué podemos nosotros brindarle al animal, en un ambiente seguro y feliz que ellos puedan disfrutar. También propone la responsabilidad legal del “dueño” del animal o de su cuidador, para asegurar que podemos proveer a estos animales un ambiente que promueva su bienestar. Y si no podemos proveerlo, no se pueden tener!!!.


Bienestar de los Gatos.
Los gatos son seres sintientes y como tales experimentan dolor y placer. El Bienestar no tiene que ver sólo con atender a sus necesidades físicas, el bienestar emocional es igualmente importante. Que el gato tenga un hogar, no significa que no tenga problemas, ya que el ambiente que le brinde su “dueño” o cuidador y su modo de vida puede tener impacto sobre el bienestar del animal. De igual manera, un gato callejero que viva exitosamente puede no tener problemas de bienestar. Aunque también es sabido que los gatos callejeros, asilvestrados o que viven en comunidades, pueden sufrir debido a la crueldad y persecución, a problemas de estrés causados por la reproducción y enfermedades, a la falta de una nutrición adecuada, heridas por accidentes, ser presa de otros animales, o métodos inhumanos de control de población. Castrar estos gatos, evita el estrés reproductivo y previene la sobrepoblación, junto con el problema de salud pública que conlleva. Los gatos hogareños pueden sufrir problemas de bienestar asociados al estrés de vivir con personas que no comprenden, o no conocen, o no logran atender las necesidades de su animal de compañía. Puede ser por deficiencia o por excesos, como por ejemplo la obesidad. También cuando los cuidados veterinarios no son tan buenos como deberían ser. Crear ciertas razas de gatos, como los de nariz chata, puede resultar en animales que sufran toda su vida de problemas de salud.

Responsabilidad de los “Dueños” o Cuidadores de Gatos Elegir tener un gato como su animal de compañía y asegurarse que no sufrirá de problemas de salud o bienestar debido a su genética, conformación y/o miedo a los humanos, implica comprender las necesidades del gato de manera de aumentar al máximo su bienestar y disminuir al mínimo su malestar. Cómo hacerlo, dependerá de cada gato individualmente.

Será responsabilidad del “Dueño” o Cuidador brindar al gato las 5 necesidades para su bienestar:

  • 1) Necesidad de un ambiente adecuado. Proveer un ambiente apropiado que incluya refugios y área de descanso confortable.
  • 2) Necesidad de una dieta adecuada. Proveer una dieta satisfactoria, apropiada y segura, así como acceso a agua fresca.
  • 3) Necesidad de ser capaz de exhibir su comportamiento normal. Proveer espacio suficiente, y enriquecimiento ambiental apropiado a la edad y condición física.
  • 4) Necesidad de convivir con otros animales, o no. Proveer compañía de con-específicos, o asegurar que no haya otros animales, en caso de que nuestro gato no acepte a otros.
  • 5) Necesidad de estar protegido del dolor, sufrimiento, heridas y enfermedades. Prevenir o diagnosticar rápidamente. Tratamiento usando buen cuidado veterinario cuando sea requerido.

Entre las responsabilidades también están: castrar a nuestro gato (o potencialmente usar otros métodos de contracepción aceptados) para prevenir preñeces no deseadas y los problemas de bienestar asociados. La castración debe realizarse antes de que el gato o la gata alcancen la pubertad, entre los 4 y 6 meses de edad. Colocar un microchip u otros elementos como collares, para ayudar a identificarlos, proveer las vacunas y otros cuidados preventivos, tomar las precauciones necesarias para evitar que nuestro gato cause inconvenientes a los vecinos.

• Bibliografía consultada:
- Cambridge e-learning Animal Welfare Course
- International Cat Care Organization
- The Truth about Cats and Dogs on-line Course, University of Edinburgh

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